Aunque la fregona es una herramienta esencial para mantener la limpieza del hogar, muchas veces se pasa por alto la importancia de limpiarla con cierta frecuencia, y esto tiene sus consecuencias negativas.
Para que estas consecuencias no te afecten a ti, a lo largo del artículo te vamos a enseñar paso a paso cómo limpiar bien tu fregona, para así eliminar la suciedad y mal olor que pueda tener.
Nota: también puedes ver nuestro otro artículo donde te mostramos cuáles son las mejores fregonas.
¿Por qué es importante limpiar la fregona con frecuencia?
Es crucial limpiar la fregona con frecuencia por varias razones. En primer lugar, una fregona sucia es menos efectiva en la limpieza y no puede eliminar la suciedad y los gérmenes de manera adecuada.
Esto puede provocar que bacterias y otros microorganismos se propaguen por el suelo, lo que puede ser perjudicial para la salud de las personas que caminan sobre él.
Además, una fregona sucia puede emitir malos olores. Esto se debe a la acumulación de suciedad y bacterias en las fibras de la fregona.
Otro motivo por el cual es importante limpiar la fregona con frecuencia, es porque prolonga su vida útil. Por nuestra experiencia propia, te podemos decir que esto también te hará ahorrar algo de dinero a la larga.
Aunque las fregonas están diseñadas para ser resistentes y duraderas, si no se les da el cuidado adecuado, pueden desgastarse y romperse más rápidamente.
¿Cómo limpiar la fregona paso a paso para eliminar la suciedad y para que no huela?
A continuación te mostramos la que en nuestra opinión es la mejor forma de eliminar la suciedad y el mal olor de tu fregona. Sigue los pasos, en orden.
Antes de comenzar con la limpieza, no olvides ponerte unos guantes que te protejan.
Mete la fregona en agua caliente
Llena un cubo con agua tibia y mete la fregona. Asegúrate de que está completamente sumergida para que todas las fibras queden bien limpias.
Pon un poco de lejía con detergente
Pon una pequeña cantidad de lejía con detergente al agua y mézclalo bien. La lejía con detergente ayudará a eliminar la suciedad y las bacterias de la fregona.
Deja en remojo la fregona
Deja en remojo la fregona durante al menos 45 minutos. Si la fregona está muy sucia, puede que necesites dejarla en remojo durante más tiempo.
Enjuaga la fregona
Enjuaga bien la fregona en agua limpia para eliminar cualquier residuo de detergente.
Escurre la fregona
Escurre la fregona para eliminar el exceso de agua.
Limpia una vez más la fregona con vinagre y limones
Para asegurar un extra de limpieza y para eliminar los malos olores, a continuación tira el agua sucia y vuelve a llenar el cubo con agua tibia. Después, echa al cubo dos tazas de vinagre blanco y tres limones exprimidos. Ahora introduce la fregona y déjala en remojo un par de horas.
Escurre de nuevo la fregona
Escurre otra vez la fregona. Asegúrate de hacerlo bien para que no quede agua en exceso, ya que esto podría provocar malos olores.
Deja secar la fregona
Cuelga la fregona en un lugar bien ventilado para que se seque. Es importante que la fregona se seque por completo antes de guardarla o usarla nuevamente. Si puedes dejarla secando al sol será mejor ya que acelerará el proceso de secado.
¿Cada cuánto hay que cambiar o sustituir una fregona?
Tienes que reemplazar tu fregona cada vez que sea necesario, con el objetivo de garantizar una limpieza efectiva y para evitar la propagación de gérmenes y bacterias.
En nuestro caso, no tenemos un periodo fijo en donde cambiamos la fregona cada cierto número de semanas o meses, sino que lo hacemos en función de los siguientes factores que a continuación te vamos a mostrar.
Observa la apariencia de la fregona
La apariencia de la fregona es probablemente el mejor indicador de cuándo debe ser reemplazada. Así pues, si las fibras están desgastadas, rotas o descoloridas, seguramente sea hora de sustituir la fregona.
Huele la fregona
Si la fregona huele mal incluso después de haber sido lavada, es probable que esté acumulando gérmenes y bacterias en su interior. Si esto ocurre es hora de cambiarla.
Considera la frecuencia de uso
Si usas tu fregona con frecuencia, tendrás que reemplazarla con más frecuencia.
Si la utilizas para limpiar grandes áreas o para tareas difíciles, como la limpieza de cocinas o baños, es posible que también debas sustituirla con más frecuencia que si la utilizas para tareas más ligeras.
Establece una rutina de reemplazo
Para evitar tener que acordarte de cuándo debes cambiar tu fregona, establece una rutina de reemplazo en función de la frecuencia con la que la usas.
De esta manera, puedes programar el cambio cada cierto tiempo, que será mayor o menor dependiendo de tus necesidades y del uso que le des.
¿Se puede limpiar la fregona en la lavadora?
La respuesta es sí, aunque para asegurarse de que la fregona se limpie adecuadamente y no se dañe durante el proceso de lavado, ni que tampoco perjudique a otras prendas de la lavadora, hay que seguir algunos pasos que a continuación te explicamos.
Limpia parte de la suciedad de la fregona a mano antes de ponerla en la lavadora
Retira la mayor cantidad posible de suciedad y pelos de la fregona, a mano, antes de meterla en la lavadora. Esto ayudará a evitar que se queden restos de suciedad y pelos en la lavadora.
Lava la fregona por separado
Es importante lavar la fregona por separado de otras prendas en la lavadora, para evitar que se ensucien o se dañen.